Desde el día que hice la tarta de Oreo y chocolate ya estaba pensando en formas de modificarla, «si añado este ingrediente», «a esta base le quedaría genial…».
Así que con motivo de una reunión de amigos, me decidí a hacer una tarta de crema pastelera de chocolate blanco y fresas sobre base de Oreo.
Cada cierto tiempo, los amigos nos juntamos y hacemos una comida para vernos y ponernos al día. Entre compromisos de unos y otros, los niños, la crisis y demás, coincidir bastantes es complicado, y quedar en un restaurante, más complicado todavía. Así que hay veces que quedamos en una casa en general y en la de «la Elis» en particular, y quedamos en llevar cada uno una cosilla. En esta ocasión yo me pedí el postre.
Ingredientes para la tarta de crema pastelera de chocolate blanco y fresas sobre base de Oreo
Para la base de galletas Oreo:
- 300 gramos de galletas Oreo
- 100 gramos de mantequilla fundida
Para la crema pastelera de chocolate blanco:
- 50 gramos de chocolate blanco (utilicé Nestle Postres)
- 100 gramos de azucar
- 500 gramos de leche
- 50 gramos de maicena
- 3 huevos
- 1 cucharada de azúcar vainillado
Para decorar:
- Fresas lavadas y secas.
- Azúcar glas
Preparación de la tarta de crema pastelera de chocolate blanco y fresas sobre base de Oreo
Empezamos realizando la crema pastelera de chocolate blanco. Pulverizamos 50 gramos de chocolate blanco junto con el azúcar durante 15 segundos a velocidad progresiva 5-7. Añadimos el resto de los ingredientes para realizar la crema pastelera y programamos 7 minutos a 90 grados y velocidad 4.
Si posteriormente vamos a rellenar la tarta con la manga pastelera, podemos introducir la masa directamente en la manga. De lo contrario, la vertemos en un recipiente y lo tapamos con un film transparente, pegándolo a la crema, como muestra la imagen.
A continuación, preparamos la base de galletas Oreo. Para ello trituramos las galletas hasta que queden hechas un polvo uniforme. Puedes utilizar el robot de cocina que tengas.
Mezclamos la galleta triturada con la mantequilla fundida y lo pasamos al molde donde vamos a realizar la tarta. Preferiblemente, el molde tiene que ser desmoldable. El que yo tengo es uno redondo de 24 centímetros y es bastante alto, por lo que cubrí todo el fondo y de alto, hasta la mitad del molde, presionando bien e intentando dejar toda la superficie de la forma más uniforme posible.
Horneamos durante unos 10 minutos para que quede la base crujiente. Hay que vigilarlo para que no se nos queme. Si prefieres que la base de la tarta quede más blanda puedes optar por no hornearlo.
Una vez que se ha enfriado el molde, lo metemos en el congelador un ratito.
Posteriormente, rellenamos el molde con la crema pastelera de chocolate blando y decoramos la parte superior con las fresas presionando un poquito y espolvoreamos con azúcar glas.
Tiene que quedar bien cortando las fresas en rodajas, distribuyéndolas de forma decorativa sobre la crema y cubriéndolas con una gelatina pero esto para la próxima vez.
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